Antes de vender un inmueble, es importante tener en cuenta varios trámites:
Obtención de la documentación necesaria: Reúne todos los documentos relacionados con la propiedad, como escrituras, licencias de construcción, planos, recibos de impuestos, certificados energéticos y cualquier otro documento que pueda ser relevante para la venta.
Verificación de la situación legal de la propiedad: Asegúrate de que la propiedad no tenga cargas pendientes, como hipotecas, embargos o litigios legales. Esto puede requerir una búsqueda en el registro de la propiedad.
Cálculo de los impuestos a pagar: Determina los impuestos que debes pagar como vendedor, como el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IIVTNU) o o el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en el caso de que la venta te genere un incremento patrimonial. Los impuestos varían según tu ubicación y situación específica.
Preparación de la vivienda: Acondiciona la vivienda para su venta, realizando las reparaciones necesarias y presentando la propiedad de la mejor manera posible para atraer a posibles compradores.
Valoración de la propiedad: Establece un precio de venta adecuado para la propiedad. Puedes consultar a un tasador o a un agente inmobiliario para obtener una valoración precisa.
Firma de un contrato de mediación: Si decides utilizar los servicios de un agente inmobiliario, deberás firmar un contrato de mediación que estipule los términos y comisiones de la venta.